Tanto si disfrutas con un maullido tranquilizador de vez en cuando como si te impacientas con todos los intentos de tu gato por entablar conversación, las razones por las que los gatos maúllan son tan fascinantes como los propios gatitos. Descubre más aquí.
Como orgulloso propietario de un gato, a estas alturas ya estarás acostumbrado a la banda sonora diaria de maullidos y ronroneos de tu gato. Pero ¿sabías que la forma de comunicarse de los gatos con otros gatos es principalmente a través del olor, y que el maullido gatuno es un lenguaje que reservan solo a los humanos? Es decir, los gatos no se maúllan entre sí, únicamente a los humanos, y el maullido es un comportamiento aprendido. Además, los maullidos suelen significar cosas distintas, y una sutil diferencia entre un maullido y otro puede indicar que tu gato te está hablando por un motivo muy concreto.
¿Por qué los gatos, famosos por su actitud de «me importa un bledo todo», se toman la molestia de comunicarse con nosotros? Quizá tienen algo importante que decirnos. Así que si tu gato no deja de maullar y necesitas ayuda para descifrar su significado, aquí tienes las principales razones por las que los gatos maúllan.
¿Por qué maúllan los gatos?
1. Para saludarte
Si estás acostumbrado a una breve salva de maullidos justo cuando cierras la puerta al volver a casa, enhorabuena: tu gato se ha dado cuenta de que faltabas. Estos maullidos rápidos son la forma que tiene tu gato de decir «hola» y «¿dónde has estado todo este tiempo?». A cambio, esperará unas caricias cariñosas y unas palabras afectuosas, antes de volver a sus ocupaciones habituales. ¡Ah, la felicidad de tener un gato!
2. Para llamar tu atención
Una de las razones por las que los gatos maúllan es para llamar tu atención y poder jugar, o bien pedirte unas caricias o un premio. Por eso, si tu gato no deja de rozarse mientras emite sus característicos maullidos, lo más probable es que quiera un ratito de mimos. Si te preguntas por qué no para de maullar el gato, es el momento de sacar la bolsita de premios. Si necesitas inspirarte, aquí van algunas ideas de juegos para gatos que puedes probar. ¡Disfruta!
3. Para que les des comida
Si tu gato no deja de maullar a determinadas horas, no está de más ver cómo tiene el cuenco de comida. Si está vacío, ya sabes por qué maúlla. Sin embargo, no le llenes el cuenco enseguida: un buen truco es esperar a que deje de maullar antes de sacar la comida. De lo contrario, aprenderá que si maúlla conseguirá comida y entonces lo hará más.
4. Para decirte que no están bien
Por desgracia, la razón por la que los gatos maúllan no siempre es fácil de averiguar, sobre todo si el tono y la frecuencia de las vocalizaciones del gato son inusuales. Si tu gato maúlla por la noche, puede estar intentando decirte que le pasa algo. De hecho, muchas enfermedades, desde las renales a problemas del tracto urinario o artritis, pueden hacer que tu gatito maúlle pidiendo ayuda. Si notas algo inusual en los sonidos que emite, siempre es mejor acudir al veterinario para descartar una posible enfermedad. Sin embargo, ten en cuenta que puede ser muy difícil leer el lenguaje corporal de un gato y que a menudo ocultan signos de dolor, así que el hecho de no maullar no significa que esté necesariamente cómodo.
Si tu gato ya no es ningún pipiolo, ten cuidado con un motivo frecuente que aparece en los gatos mayores: el síndrome de disfunción cognitiva. Algunos de los síntomas son la confusión y los maullidos nocturnos, así que consúltalo con el veterinario.
5. Para indicar estrés
Si detectas más maullidos de lo habitual en tu amigo felino, piensa en posibles alteraciones o cambios en el entorno de tu gato. Una nueva casa, una nueva mascota o un bebé pueden hacer saltar las alarmas en la mente de tu compañero. Así que ten en cuenta cualquier cambio e intenta tranquilizar a tu gato ofreciéndole más atención y un ratito de tranquilidad.
Razas de gatos que maúllan más
Un gato elegante y grácil al que también le gusta socializar: si tienes un gato siamés, ya sabrás que estos simpáticos gatitos no se caracterizan por la paz y la tranquilidad. Pueden llegar a ser ruidosos, pero también son muy divertidos y se convertirán inmediatamente en parte de la familia.
Al igual que los siameses, a los orientales de pelo corto les gusta hacerse notar. Es un gato al que le gusta maullar, jugar y estar rodeado de gente.
Los gatos Maine Coon se distinguen por el agradable y apacible gorjeo que emiten. Son muy juguetones y simpáticos, y maúllan como locos para decirte lo mucho que disfrutan de tu compañía.
Afectivos y muy enérgicos, los bengalíes tienen fama de ser también una raza muy habladora. Con su amplio vocabulario pronto te hará averiguar qué intenta comunicarte.
Qué hacer si el gato no deja de maullar
He aquí algunos consejos para gatos que siguen maullando cuando nada parece hacerles parar. No lo ignores La razón principal por la que los gatos maúllan es que intentan comunicarse contigo. Ciertamente, no siempre tienen cosas importantes que decir, pero por si acaso esa fuera su señal de emergencia, busca otras señales que acompañen a los maullidos.
No lo ignores
La razón principal por la que los gatos maúllan es que intentan comunicarse contigo. Ciertamente, no siempre tienen cosas importantes que decir, pero por si acaso esa fuera su señal de emergencia, busca otras señales que acompañen a los maullidos.
No lo castigues
Has tenido un largo día en el trabajo o estás ocupado preparando una comida y lo último que te hace falta es que tu gato maúlle sin parar. Aunque maullar puede ser molesto, lo mejor es mantener la calma y evitar gritar o castigar al gato. Eso no solo no sirve para acabar con los maullidos, sino que también puede hacer que tu gato tenga miedo de avisarte de problemas en el futuro. En vez de eso, repasa la lista anterior de motivos por los que puede maullar e intenta determinar qué intenta decirte.
Rompe el hábito
Si tu gato no para de maullar cada vez que tiene hambre o quiere jugar, lo mejor que puedes hacer es disuadirle de este comportamiento. No le des a tu gato ninguna recompensa por maullarte. Espera a que acabe de decir lo que quiere antes de sacar la comida o su juguete favorito. Visita al veterinario Si tu gato siempre ha sido maullador, tal vez no haya nada de que preocuparse. Sin embargo, si el maullido del gato se vuelve excesivo y con un tono inusual, podría ser indicio de una enfermedad subyacente. Acude al veterinario y coméntale cualquier síntoma o comportamiento inusual.
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