Para maximizar las posibilidades de encontrar a un gato perdido tienes que actuar rápido. ¡Y no ponerte nervioso!
CÓMO ENCONTRAR A TU GATO
Dedica al menos 15-30 minutos a llamar al gato por su nombre, rodeando el sitio donde fue visto por última vez. Haz sonidos familiares, como golpear el borde de una lata con un tenedor o agitar una caja de comida seca.
Deja una puerta entreabierta al volver a casa.
Informa inmediatamente a los vecinos sobre la ausencia de tu gato y pídeles permiso para mirar en sus garages ya que los gatos en ocasiones se esconden ahí. Si sus ventanas dan a tu casa quizás puedan echar un vistazo por ti.
Peina el vecindario (reclutando a vecinos y niños si es posible) informando puerta a puerta de las características de tu gato, tu número de teléfono y ofreciendo una pequeña recompensa por cualquier información.
Camina o pedalea arriba y abajo por la última calle en que se vió a tu gato y pasea con tu coche por tu vecindario. Pregunta a la gente que te encuentres y amplía tu búsqueda a campos y bosques de los alrededores.
Los gatos que no están acostumbrados a vivir en el exterior pueden entrar en pánico y esconderse entre los arbustos. Los gatos heridos o enfermos también tienden a esconderse.
Utiliza las secciones de "perdidos y encontrados" de los periódicos locales para anunciar tu pérdida, y revisalos diariamente por si alguien comunica que lo ha encontrado.
Prepara pasquines con la información relevante sobre tu gato, incluyendo su nombre y una descripción de su aspecto. La información de contacto debe incluir nombre, teléfono y e-mail. Si es posible, incluye una fotografía de tu mascota y fotocópialo. Imprime y distribuye los pasquines por donde tu gato fue visto por última vez y también en los alrededores de tu vecindario. Distribuyelo también en todos los tablones informativos que tengas a tu alcance.
Llama a los veterinarios cercanos avisándoles de tu pérdida y proporciónales la información del punto anterior.
ORGANIZACIONES DE CONTACTO
Muchas mascotas perdidas se llevan a los refugios cercanos o perreras. Las organizaciones locales de ayuda a los animales también son un sitio que conviene visitar. Asegúrate de proporcionar detalles como el color, la edad, el tamaño, el temperamento y otros datos identificativos (microchip, collar, etc...).