Pese a que los perros suelen aceptar mejor los desplazamientos que los gatos, la experiencia de viajar en avión no resulta muy agradable para ellos por lo que, en la medida de lo posible, si decides pasar unos días junto a tu compañero de juegos, te recomendamos que intentes buscar otras alternativas de trasporte.
Si la única opción disponible es el avión, es muy importante que tengas en cuenta los aspectos que comentaremos a continuación, porque existen muchos condicionantes que debes conocer para garantizar el bienestar de tu perro durante el trayecto.
Lo primero que te recomendamos es que te pongas en contacto con la aerolínea escogida con 4 semanas de antelación. Piensa que cada aerolínea tiene políticas diferentes respecto al transporte de mascotas. Lo ideal es que tu perro pueda viajar contigo en cabina, dentro de su transportín, justo debajo de tu asiento delantero. Casi todas las aerolíneas que permiten que los perros viajen en sus vuelos, ofrecen esta posibilidad por un importe que varía en función del destino, siempre y cuando se cumplan las siguientes premisas en términos generales:
- El tamaño de tu perro no exceda los 8 kilos. En la mayoría de casos, sumándole a su peso el del transportín.
- La edad del perro supere las 10 semanas de vida.
- El transportín esté homologado, y se adapte a las medidas determinadas por cada compañía aérea, permitiendo que el animal viaje cómodamente y pueda estirarse si lo desea.
- Se asegure la correcta ventilación del perro dentro de su transportín, y se proteja la superficie del mismo mediante el uso de empapadores o bases impermeables.
- El transportín no desprenda malos olores que puedan molestar a los pasajeros.
- Si es de raza considerada potencialmente peligrosa, lleve puesto el bozal durante el trayecto, aunque viaje dentro de su transportín, con el fin de evitar que pueda dañar las estructuras del mismo debido a un exceso de estrés o nerviosismo.
- Realices la reserva con tiempo suficiente para asegurar que tu perro podrá viajar en cabina contigo. Piensa que todas las compañías que permiten mascotas en sus vuelos, establecen un límite de plazas. Si no tienes en cuenta este aspecto, es posible que tu perro deba viajar en bodega, pese a cumplir los requisitos mencionados.
- Debes llevar la cartilla de vacunación de tu mascota y, en caso de vuelos internacionales, su pasaporte (consulta con tu veterinario cómo solicitarlo).
Si tu perro excede los 8 Kgs, la única opción disponible es que viaje en bodega dentro de un transportín que se adapte a sus necesidades de confort. Aunque actualmente la mayoría de líneas aéreas suelen controlar que esta experiencia sea lo más segura, y confortable para tu perro (correcta ventilación, control de la temperatura, etc), el simple hecho de estar lejos de ti durante el trayecto puede inquietar mucho a tu perro, por lo que elegir un trayecto directo, sin escalas, es altamente conveniente. Ten en cuenta también, que ciertas compañías no aceptan que viajen en bodega los perros de razas consideradas potencialmente peligrosas. Por todo ello, insistimos en la conveniencia de que te informes debidamente, y te inclines por las compañías aéreas que te ofrezcan más garantías.
En segundo lugar, es necesario que acudas a tu veterinario días antes de realizar el vuelo para que le realice una exploración a tu perro, y elabore un certificado de salud que garantice que su estado es óptimo, que está desparasitado (interna y externamente), que posee microchip, y que la cartilla de vacunas está al día (incluida la de la rabia, que es imprescindible para acceder a determinados destinos). Este aspecto es muy importante, ya que para poder viajar la aerolínea te solicitará el certificado de salud y la cartilla de vacunas, y también el pasaporte en el caso de que viajes fuera de España.
El veterinario te recomendará que no des de comer a tu perro el día del viaje para evitar que vomite si siente mareo, y puesto que no es muy aconsejable la administración de sedantes o tranquilizantes si se viaja en avión, te podrá aconsejarte otras opciones para minimizar su posible estrés.
Por último, ten en cuenta que tu perro deberá atravesar el dispositivo de inspección para personas en tus brazos o caminando por el arco detector, mientras su transportín, collar y correa pasarán por el dispositivo de rayos X destinado al control del equipaje.
Los perros guía o de asistencia podrán viajar junto a sus propietarios, atados, con bozal, y sin necesidad de abonar ningún cargo adicional, siempre y cuando lleven su pasaporte, su cartilla veterinaria actualizada, microchip, y tengan más de 3 meses de edad. Se les suele asignar un asiento en la parte delantera del avión, para que puedan embarcar y desembarcar sin que ello incida en el resto de pasajeros. Si éste fuera tu caso, informa con antelación a la compañía aérea escogida, para que lo tenga en cuenta y pueda proceder en consecuencia.