Este perro de tamaño mediano, corto y robusto es más largo que alto. El macho adulto mide entre 33 y 35 cm y la hembra adulta, de 31 a 33 cm. Su peso oscila entre los 11,5 y los 16 kg. El pelaje corto lo protege de las inclemencias del tiempo y puede ser de color gris acero, gris-marrón, gris-amarillo, rojizo-amarillo o rojizo-marrón. Para más información sobre los colores y tipos de pelaje, consulta el estándar de raza.
Por su carácter alerta y enérgico, el vallhund es un perro guardián innato. Afable y dócil, es un placer adiestrarlo y pasar con él tiempo de calidad en familia. Además, es un compañero fiel para sus seres queridos. Si se le deja solo mucho tiempo o si no se le ofrece el ejercicio y la atención que necesita, ladrará y puede volverse destructivo, como les ocurre a muchos perros.
También llamado perro pastor sueco, se cree que esta raza tiene casi 1000 años de historia. Se cree que podría estar emparentado con el corgi galés de Pembroke, otra raza muy antigua que se empleaba para guiar al ganado. En su país natal, el vallhund recibe el nombre de vastgotaspets, que significa «spitz de los godos orientales». A pesar de su vasta historia, el vallhund estuvo al borde de la extinción en los años cuarenta, pero, por suerte, gracias al esfuerzo de dos criadores especializados se pudo salvar la raza.
El vallhund sueco suele ser una raza sana. Como sucede con otras muchas razas, pueden tener trastornos oculares y displasias de cadera (una afección que puede provocar problemas de movilidad), por lo que es importante realizar pruebas oculares y de cadera a estos perros antes de su crianza.
El vallhund sueco necesita, por lo menos, una hora diaria de ejercicio, aunque aguanta mucho más. Es una raza muy versátil y responde bien a los nuevos retos: desde pastorear a las ovejas hasta las pruebas de agility.
La dieta de tu perro debe contener la proporción adecuada de todos los principales grupos de nutrientes. Además, deberá tener siempre agua fresca a su disposición. Es importante realizar comprobaciones regulares para mantener al perro en perfecta forma y recuerda darle de comer dos veces al día siguiendo las pautas de alimentación de su alimento específico.
Su pelaje es fácil de mantener y está formado por un manto inferior tupido y suave y un manto exterior ceñido al cuerpo y de textura áspera. Se recomienda cepillarlo bien una vez a la semana.
Aunque tradicionalmente la mayoría de perros son buenos con los niños, todos los perros y niños necesitan que se les enseñe a llevarse bien y a respetarse mutuamente para estar seguros. Aun así, los perros y los niños pequeños nunca deberían quedarse solos y los adultos deben supervisar todas las interacciones entre ellos.
