Como propietario de un gato, probablemente andes siempre buscando formas de mimar a tu minino, y tal vez te hayas preguntado si la comida que te gusta puede ser buena también para él. Por ejemplo, las fresas. ¿Pueden comer fresas los gatos? Y, en caso afirmativo, ¿cómo hay que dárselas y en qué cantidad?
En este artículo, te damos información y recomendaciones acerca de darle fresas a tu gato, así que, sigue leyendo.
¿Pueden comer fresas los gatos?
Sí. Técnicamente, se trata de una fruta segura para un gato sano, ofrecidas con moderación. Sin embargo, si tu gato tiene problemas de salud, como diabetes o problemas de estómago, es mejor evitar este tipo de fruta. Además, es buena idea consultar con tu veterinario si no estás seguro de si tu gato puede comer fresas o no. Cada gato es distinto y, mientras a algunos les encantarán las fresas, otros no las tolerarán en absoluto.
Además de preguntar «¿Pueden comer fresas los gatos?», también deberías pensar en si le aportarían algún beneficio a tu gato o no.
Aunque, generalmente, los gatos pueden comer fresas sin problemas, hay algunos aspectos que debes tener en cuenta. Los gatos son animales carnívoros obligados, por lo que las frutas, como las fresas, no les aportan los nutrientes que necesitan y que reciben al comer carne. Ello significa que los gatos no necesitan un alimento como las fresas.
¿Cuántas fresas puede comer un gato?
Para asegurarte de que tu gato no sufre un empacho, es mejor limitar la cantidad de fresas que puede comer un gato sano a una fresa o menos al día. También es recomendable utilizarlas únicamente como premio y no dárselas más de un par de veces a la semana.
¿Qué formato de fresa pueden comer o no comer los gatos?
Fresas congeladas
Sí. Siempre y cuando las cortes en trocitos pequeños, las laves a conciencia y le quites el tallo, las fresas congeladas pueden ser un premio ideal para tu gato en los calurosos días de verano.
Helado de fresa
Puesto que los helados tienen un alto contenido en azúcares y grasas, es mejor que evites dárselos a tu gato, con independencia del sabor. En realidad, la mayoría de los gatos son intolerantes a la lactosa, por lo que los helados podrían provocarles problemas digestivos, tales como diarrea y molestias estomacales.
Yogur de fresa
Los gatos no deben comer yogur de fresa ni ningún tipo de yogur azucarado por este mismo motivo. Pueden tomar pequeñas cantidades de yogur natural sin azúcar ni edulcorantes, pero, antes de dárselo, consulta a tu veterinario, ya que tu gato podría ser intolerante a la lactosa.
¿Se pueden utilizar las fresas como premio en el adiestramiento de un gato?
Sí. Ofrecidas con moderación, las fresas pueden ser un gran incentivo para que tu gato aprenda trucos. No obstante, algunos gatos se verán más motivados por otros premios específicos para gatos, así que es buena idea priorizar sus preferencias y requisitos nutricionales. Siempre debes asegurarte de que cualquier cosa que le ofrezcas como premio en el adiestramiento tiene que ser en pequeñas cantidades, para prevenir problemas como la obesidad y el aumento de peso, que pueden dar lugar a enfermedades como la diabetes o la artritis.
Después de consultar con tu veterinario si las fresas son un premio seguro para tu gato, puedes empezar por ofrecerle un trozo muy pequeño, para observar su reacción.
Lava las fresas a conciencia para eliminar cualquier pesticida o suciedad. Quítale los tallos y córtalas en trocitos pequeños para evitar que se atragante.
Aunque los gatos pueden comer fresas de forma segura con moderación, a algunos es posible que no les guste su sabor, así que no vuelvas a ofrecérselas si las rechaza.
En definitiva, ten en cuenta que lo que importa es la nutrición general de tu gato, así que consulta a tu veterinario si tienes alguna inquietud acerca de darle fresas a tu minino.