En nuestras fábricas, todos los días realizamos numerosas pruebas para garantizar que las materias primas y el producto final cumplen con nuestros estrictos criterios y que ofrecemos comida para mascotas segura y de gran calidad.
Basándonos en un conjunto de estándares predefinidos, nuestros productos finales se evalúan siguiendo una serie de parámetros físicos y sensoriales. Estos incluyen cosas como comprobar el tamaño, el color, el aroma y la densidad de la croqueta. Además, nos aseguramos de que no haya presencia de productos fragmentados nicontaminación cruzada.
Para ello, se utilizan tanto instrumentos de medición físicos como sensoriales, como la visión y el olfato. Nuestro equipo de control de calidad recibe formación específica al respecto, que se actualiza cada año. Al final del día, una vez analizadas todas las pruebas y obtenidos los resultados, la producción del día anterior empieza a distribuirse a nuestros minoristas para su posterior venta.
Los controles de los productos finales son solo una parte de los más de 1.400 controles realizados diariamente a lo largo de todo el proceso. Efectuamos unas 300 pruebas diarias a las materias primas y a los materiales de envasado que entran en nuestras plantas de fabricación, y realizamos otros 1.100 controles durante el proceso de producción y a los productos finales.