Hacer ejercicio no es solo dar paseos diarios. Descubre juegos que ayudan a mejorar la concentración y a desarrollar el cerebro de tu cachorro.
Generalmente, para ejercitar a nuestros cachorros damos paseos diarios, y no hay duda de que nuestros perros se benefician de estos, pero hacer ejercicio no consiste solo en estimular el cuerpo.
Ejercitar el cerebro de tu cachorro puede ayudar en su desarrollo y hacer que sea más fácil enseñarle trucos y órdenes de cachorro. También es una forma divertida e interactiva de crear vínculos con tu cachorro y mejorar vuestra relación. Sigue leyendo para descubrir qué juegos para perros puedes probar.
Juegos mentales para tu cachorro
La resolución de problemas y la estimulación mental tienen que ver con utilizar el entusisasmo natural del cachorro por el juego, junto con su gran inteligencia, para resolver acertijos y aprender nuevas habilidades. A la mayoría de los cachorros, usar su cerebro de esta manera puede estimularlos y cansarlos.
Los cachorros están llenos de energía, pero sus cuerpos aún no están completamente desarrollados, por lo que puede ser difícil hacer con ellos todo el ejercicio que necesitan para quemar su gran cantidad de energía sin forzar los músculos, las articulaciones y los huesos que aún están en crecimiento. Jugar a juegos y rompecabezas supondrá hacer más ejercicio y, de paso, evitará que hagan cosas como morder tus muebles.
Hay diferentes tipos de juegos para los perros, incluidos los rompecabezas para estimular sus cerebros y mantenerlos activos. Como hay tanta variedad, pronto verás que algunos les aburren un poco mientras que otros serán sus claros favoritos. Depende de ti descubrir con qué disfruta más tu cachorro.
Juegos de escondite para cachorros
Estos se pueden jugar en cualquier lugar de la casa, en el jardín e incluso durante los paseos diarios. Para comenzar este juego, pídele a alguien que te ayude y que pueda sujetar a tu cachorro. Muéstrale a tu cachorro que tienes algunas golosinas, luego vete y escóndete en algún lugar, idealmente en un lugar que sea bastante fácil de encontrar al principio.
Luego, la persona que tiene a tu cachorro lo suelta para que pueda ir a buscarte, cuando te encuentre recompénsale con golosinas y mostrándole lo feliz que eres porque te ha encontrado. Empieza a jugar al escondite cuando tu cachorro aún sea pequeñito, ya que mejorará su respuesta cuando le llames más adelante en la vida y lo hará mucho más receptivo a este juego y a volver a ti cuando te pierde de vista.
Juegos de olfato
Otro juego mental para perros es una variación del escondite, donde tu cachorro necesita usar su olfato para encontrar un regalo o un juguete. Puedes dejar un rastro de golosinas que conduzcan a su juguete favorito o incluso a su cena y, a medida que tu cachorro mejore, puedes reducir la cantidad de golosinas en el camino.
Este juego es ideal para cachorros y puede divertirles el resto de su vida. Esconde golosinas (o una pelota para los cachorros obsesionados con los juguetes) debajo de una toalla pequeña, debajo de algunos cojines, en un calcetín viejo o incluso debajo de macetas de plástico alrededor del jardín para que tu cachorro las olfatee. Puedes inventar variedades con estos juegos mentales para tu perro y ejercitar su mente y su olfato.
Juguetes interactivos
Hay muchos juguetes en el mercado que suponen un desafío de resolución de problemas para acceder a las golosinas. Algunos ruedan, otros rebotan, otros se mueven de manera impredecible o tienen partes que se mueven inteligentemente, y todos son un desafío diferente para tu cachorro. Estos pueden ser cualquier cosa, desde juguetes Kong, que puedes rellenar con comida y que satisfacen instintos naturales como morder o cazar. Algunos exigen solo algo de destreza canina para sostener el juguete y un poco de masticación, mientras que otros pueden ser realmente complicados y necesitan una combinación de cerebro, boca y patas para llegar a las golosinas.
No esperes que tu perro comprenda estos rompecabezas de inmediato. Trabaja con él, muéstrale qué hacer y facilítale empezar hasta que lo haya resuelto solo.
No tienes que gastarte una fortuna: puedes también esconder golosinas en el cartón de un rollo de papel higiénico, del papel de cocina, en cajas pequeñas o incluso en una botella de plástico abierta. Luego, anima a tu cachorro a que averigüe cómo llegar hasta lo que has escondido. Asegúrate de supervisar todos los juegos con tu perro y de que cualquier cosa que uses como juguete casero sea seguro para masticar. Vigila también, por su seguridad, si hay alguna parte que pueda hacerle daño como un plástico roto o algún tapón o trozo que se pueda tragar.
Enséñale trucos a tu cachorro
Tener un perro que hace trucos geniales como mover una pata o cerrar la puerta parece divertido. Pero en realidad, lo mejor no es lo que haga sino el hecho de que las sesiones de entrenamiento regulares y los juegos le dan una gran estimulación mental y construirán vuestro vínculo.
Comienza de manera simple cuando le enseñes trucos a tu cachorro y haz que gire en círculo o coloque sus patas delanteras en un cubo que está boca abajo atrayéndolo con una golosina. Pronto podrás hacer trucos más avanzados sorprendentes, pero recuerda que lo interesante no es llegar a dejar sin palabras a tus vecinos sino estimular la mente de tu perro.
Una vez que empiezas a pensar en trabajar tanto la mente como el cuerpo de tu cachorro, empiezas a ver cada juguete como un posible juego mental para él y cada paseo como una oportunidad para ejercitar su cuerpo y mente. Aún mejor, cuando tu cachorro empieza a ser más independiente, estas interacciones entre vosotros ayudan a mantener su atención en ti, mejoran su comportamiento y te dan más herramientas para pasar con éxito su adolescencia.
Si quieres obtener más información sobre el cuidado y el entrenamiento de tu cachorro, echa un vistazo a nuestro artículo sobre actividades para perros y descubre aún más actividades divertidas que podéis hacer juntos.