La sordera es el problema de salud más habitual en esta raza, que se observa con más frecuencia en los bull terriers blancos. Se pueden hacer pruebas auditivas a los perros desde edades tempranas. Pueden tener problemas renales heredados y problemas cardíacos, y los trastornos de la piel son relativamente frecuentes.
- Perro apto para dueños con algo de experiencia
- Se requiere algo de adiestramiento
- Le gustan los paseos activos
- Le gusta pasear una hora al día
- Perro mediano
- Babeo mínimo
- Requiere aseo una vez por semana
- Raza no hipoalergénica
- Perro expresivo y ladrador
- Perro guardián. Ladra y está alerta
- Puede necesitar entrenamiento para vivir con otras mascotas
- Puede necesitar entrenamiento para vivir con niños
Personalidad
Conocido por su afinidad con la gente, el bull terrier miniatura es un perro divertido y vivaracho, aunque puede ser terco sin la motivación adecuada. Es más pequeño que su homólogo de gran tamaño, pero parece que a este perro energético y atrevido no le importa demasiado. Es un perro grande con un cuerpo pequeño y no se sentirá intimidado por ningún perro de mayor tamaño al que se enfrente. Es fundamental la socialización desde cachorro, al igual que el adiestramiento con correa, ya que le encanta tirar.
Origen
A principios del siglo XIX se seleccionaron y criaron varios ejemplos de bull terrier pequeños para crear el bull terrier miniatura, animal utilizado como ratonero, además de compañero. El bully de tamaño más grande resultó ser más popular y la falta de interés en el de menor tamaño a principios del siglo XX resultó en su eliminación del registro de razas del Kennel Club en 1918. Por suerte, varios entusiastas de la cría mantuvieron viva esta raza y se formó un club en 1938.
¿Sabías que...?
- El bull terrier miniatura casi llega a ser un perro toy. Su tamaño se redujo y aligeró tanto que empezaron a aparecer deformidades y, durante algunos años, la raza perdió popularidad.
- Si bien es probable que muchos bull terrier miniatura hayan aparecido en la literatura, dibujos animados y películas, casi siempre se los etiqueta como bull terrier, ya que mucha gente desconocía (y, en algunos casos, sigue desconociendo) que existe una raza de bull terrier miniatura distinta de la más grande. Bullseye, el perro que aparece en la primera película de Oliver Twist, era un bull terrier, y resulta complicado saber con certeza si se trataba de un bull terrier estándar pequeño o un bull terrier miniatura grande. No obstante, en muchas adaptaciones teatrales, el papel lo interpreta un perro miniatura por motivos de espacio.