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Perro del faraón

Estos perros de tamaño mediano y pelaje corto con orejas erguidas tienen un aspecto elegante y atlético. Pueden ser de color canela o canela oscuro y a veces con manchas blancas. Los machos adultos miden entre 56 y 63 cm de alto y pesan de 23 a 25 kilos. Las hembras adultas miden entre 53 y 61 cm y pesan de 20 a 23 kg.

Esperanza de vida
De 11 a 14 años
Peso
Entre 20 y 25 kg
Altura
De 53 a 63 cm
Colores
El perro del faraón se presenta en distintas tonalidades de canela, en ocasiones con manchas blancas en la cola, el pecho, los dedos y la cara
Tamaño
Mediano
Grupos del Kennel Club de Reino Unido
Sabueso
¿Sabías qué?
  • Perro apto para dueños con experiencia
  • Se requiere algo de adiestramiento
  • Le gustan los paseos activos
  • Le gusta pasear una hora al día
  • Perro grande
  • Babeo mínimo
  • Requiere aseo una vez por semana
  • Raza no hipoalergénica
  • Perro expresivo y ladrador
  • No es un perro guardián
  • Puede necesitar entrenamiento para vivir con otras mascotas
  • Puede necesitar entrenamiento para vivir con niños

Personalidad

El perro del faraón es un perro bastante independiente que, a la vez, es muy fiel a la familia. Tienen el deseo interior de cazar y la resistencia necesaria para seguir avanzando con o sin su dueño. Aquellos perros del faraón que no se hayan sociabilizado con otros animales desde pequeños, verán como presas a los gatos y otros animales de menor tamaño. Pueden ser bastante ladradores y, como son una raza muy sociable, les encanta la compañía de otros perros y de los humanos.

Origen

Se han encontrado restos de perros de un aspecto similar al del perro del faraón que datan del año 4000 a. C. Se cree que mucho antes del Antiguo Egipto, los fenicios ya adiestraban a lebreles y los dejaban en islas aisladas, en las que se reprodujeron entre ellos durante siglos. Los fenicios colonizaron la isla de Malta aproximadamente en el año 1000 a. C. y se llevaron a los lebreles consigo. Valoraban mucho a estos perros por su capacidad para cazar conejos y empezaron a conocerse como lebreles, los antecesores del perro del faraón que conocemos hoy en día.

El problema más común que padece el perro del faraón es el desplazamiento de la rótula (luxación de rótula).

Este perro necesita mucho ejercicio: unas dos horas o más al día. Cuando empiezan a jugar, no dejan de correr. Como pueden saltar mucha altura, necesitarás una valla lo bastante alta en el jardín para que no se escape. En invierno o épocas más frías, puede que necesiten prendas de abrigo que los proteja del frío.

La dieta de tu perro debe contener la proporción adecuada de todos los principales grupos de nutrientes. Además, deberá tener siempre agua fresca a su disposición. Es importante realizar comprobaciones regulares para mantener al perro en perfecta forma y recuerda darle de comer dos veces al día siguiendo las pautas de alimentación de su alimento específico.

El perro del faraón es fácil de asear. Puedes hacerlo con un guante quitapelos de goma que eliminará el pelo suelto y muerto.

Aunque tradicionalmente la mayoría de perros son buenos con los niños, todos los perros y niños necesitan que se les enseñe a llevarse bien y a respetarse mutuamente para estar seguros. Aun así, los perros y los niños pequeños nunca deberían quedarse solos y los adultos deben supervisar todas las interacciones entre ellos.

¿Sabías que...?

  • Cuando se emociona, el perro del faraón se ruboriza; la trufa y las orejas adquieren un brillo más rojizo por la falta de pigmento negro.
  • El perro del faraón es famoso por su feliz cara sonriente, y también se le puede adiestrar para que sonría.
  • Sus largas orejas puntiagudas son totalmente naturales y se mantienen erguidas ya en torno a las 4 semanas de edad.
  • El primer perro del faraón que participó en la exhibición canina Crufts fue Birling Zahara, en 1970.
  • Este perro es un gran saltador, por lo que necesitarás poner una valla de al menos 1,8 m de altura en tu jardín para mantenerlo dentro.

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