Es un perro de tamaño mediano, alto, de pelo corto y duro y tiene las orejas erguidas. Puede ser de color blanco, castaño o tipo «león» o bien presentarse en cualquier combinación de dichos colores. Un Podenco ibicenco adulto puede medir entre 56 y 74 cm de altura aproximadamente y pesar de 19 a 25 kg.
Es una raza muy cariñosa y sensible. Es muy fiel, suele tener afinidad con los niños y es una excelente mascota en el hogar correcto. Aun así, no es una raza para cardíacos: pueden ser muy ladradores y necesitan mucha compañía, no es una raza que se pueda dejar sola durante muchas horas.
Esta raza es un auténtico vestigio de la historia. Las raíces del podenco ibicenco se remontan más allá del año 4000 a. C. Se les relaciona sobre todo con la época de los grandes faraones, ya que aparecen representados en muchos frisos; el símbolo más conocido es el de Anubis. A decir verdad, la raza prácticamente no ha cambiado en varios miles de años. Los comerciantes fenicios llevaron el podenco ibicenco a las Islas Baleares y, en la actualidad, todavía se le puede encontrar en España y en sus islas.
El podenco ibicenco es una raza resistente, con pocos problemas de salud conocidos. Se tiene constancia de algunos trastornos neurológicos, pero no parecen ser habituales.
Estos perros necesitan mucho ejercicio: un par de horas al día en el caso de los adultos. Cuando detectan un rastro, no dejarán de seguirlo; por eso es esencial cerciorarse de que respondan bien a nuestra llamada y dejarlos sueltos solo en zonas seguras donde no haya tráfico ni otros peligros.
La dieta de tu perro debe contener la proporción adecuada de todos los principales grupos de nutrientes. Además, deberá tener siempre agua fresca a su disposición. Es importante realizar comprobaciones regulares para mantener al perro en perfecta forma y recuerda darle de comer dos veces al día siguiendo las pautas de alimentación de su alimento específico.
El podenco es fácil de asear, tanto en la variedad de pelo corto como en la de pelo duro. Con un cepillado semanal bastará para ambos pelajes.
Aunque tradicionalmente la mayoría de perros son buenos con los niños, todos los perros y niños necesitan que se les enseñe a llevarse bien y a respetarse mutuamente para estar seguros. Aun así, los perros y los niños pequeños nunca deberían quedarse solos y los adultos deben supervisar todas las interacciones entre ellos.
Si bien se indica que el pelaje del podenco ibicenco se muestra en un color llamado «león», parece haber cierta controversia acerca de qué color es realmente y de si es aceptable. Algunas personas definen el color «león» como un rojo diluido, mientras que, para otras, se trata de un rubio oscuro amarillento. Resulta imposible encontrar imágenes de este color, que no se da en los podencos ibicencos existentes en EE. UU.
